martes, 24 de junio de 2008

Ausencias que duelen

La desaparición forzada de personas, que debían esfumarse en la nada, fue el método elegido por la dictadura militar argentina de 1976 a 1983. Según varios de sus jefes, así buscaron evitar la condena de la Santa Sede, con la aprobación sigilosa de la jerarquía argentina. Pero a cambio consiguieron que aquel pasado atroz llegara a ser un insomne presente perpetuo, como la maldición que Neruda pensó para Franco. Más que los juicios penales, las investigaciones periodísticas, o los ensayos filosóficos, el arte da cuenta del vacío lacerante que la ausencia inexplicable provoca. Como las esculturas de Juan Carlos Distéfano o los poemas de Juan Gelman, los cuadros de Carlos Alonso o los del español Ramos Gucemas, las fotograías de Gustavo Germano y los puntos que en cada leyenda reemplazan al nombre ausente evocan ese trauma fundador de la identidad argentina contemporánea y nos introducen al misterio del tiempo con la muda violencia de un gesto congelado.

Horacio Verbitsky
Escritor y periodista argentino
Prólogo del libro "Ausencias"


























Juntas. La típica foto de los años 70 con las chicas en el barrio.


Sola. La sobreviviente junto a lo que ahora es una pura ausencia.




Cuatro hermanos.Gustavo,Guillermo,Diego y Eduardo Germano.



Grupo de amigos en 1971.Hoy faltan dos.




Raul y su hemano Manuel con sus novias en 1973.




Laura con sus padres en 1976.









Aún caminan conmigo
Aún caminan contigo,
aún caminan conmigo,
los que nunca se fueron,
los que nunca se han ido.

Hasta el fin de los tiempos,
los desaparecidos,
los compañeros nuestros,
nuestros seres queridos.

Van contigo y conmigo.
No contaban con eso,
no han desaparecido,
no pudieron con ellos,
ni pudieron contigo.

Aún están con nosotros,
todavía más vivos,
nunca desaparecen
los desaparecidos.

Ellos saltan las rejas,
ellos salen del río,
y derriban los muros,
van contigo y conmigo.
Más allá del silencio,
más allá del olvido,
los compañeros nuestros,
nuestros seres queridos.

Teresa Parodi
¡Ni olvido ni perdón!


5 comentarios:

Anónimo dijo...

Bien por vos FER me encanta esa idea de "Hacer los Medios" te mando video de una cancion tremenda que acompaña ese archivo de fotos tremendo tambien.La canta una compañera para esos compañeros.
Abrazos a todos y todas.
Alejo
http://es.youtube.com/watch?v=6yAtVrV34eU

Vale dijo...

impresionante! vi la muestra de fotos en el Recoleta y el agujero de la ausencia se siente de un modo increíble.

Ricardo Caballero dijo...

y de como amor+arte nos reúnen para (de)mostrar(nos) el recuerdo que nos con-MUEVE!

muy valiosa propuesta para una elaboración colectiva que nos nutra de sentido.

Un abrazo solidario,
Ricardo.

Alejo: conmovedora la recreación interpretativa de Liliana del clásico de Paco.

Ianina Lois dijo...

Hola toda/os! ¿cómo va?
hace un tiempito que no entraba al blog... muy fuerte este post, tan simple y tan claro el poder de estas imágenes.

abrazos!!!

Iani

Ianina Lois dijo...

Alejo, recién escucho la canción... la letra el cantar de la Herrero el día gris la emoción la piel de gallina...

a veces las palabras sobran, y una canción y una imagen nos dicen mucho más

"....nunca te entregues, ni te apartes junto al camino, nunca digas no puedo más y aquí me quedo..."

otro abrazo